Sinestesia

Que alegría salir un día de lluvia y caminar, escuchar el color del cielo y las fieles notas de un arrollado de primavera, seguir caminando por los agridulces sabores del camino, solo para encontrarme contigo, y cambiar el sabor del día, con el color verde de tu voz y escuchar los sonidos que solo tu mirada trae, no importa si hace mucho frío o el cielo no nos acompañe, después de todo, siempre me han gustado los días lluviosos.