Libre de sospechas

Caminaba atento con sus lentes oscuros como esperando algo, no habían ni cigarros ni miradas al vacío cuyas intenciones se encuentraban ocultas en aquel vidrio negro. Documento en mano, lapiz, goma. Nadie sospechaba, miraba la hora a cada rato, creía que no se notaba, se pilló con mas de un compañero, pero era hombre de pocas palabras, respuestas cortas y precisas, el tiempo llega, y luego de la escoltada entrada espero tranquilo el timbre, una hoja firmemente pegada en la puerta contenía su nombre y su número secreto. Ya han dicho su nombre ya esta sentado ya nadie sospecha, todos estan metidos en sus plastificadas hojas. Él sabía más que todos como terminaría todo esto, las instrucciones ya estan dadas, pueden empezar. Sin provocar sospecha ojeo cada pregunta, como si de ellas sacara algo, respondío obviedades no quería quedar mal a estas alturas. Minutos eternos, eternos y sinceros, si bien lo había pasado bien los últimos días, esto iba más allá de sus pensamientos, el tiempo se le acababa, tomarse un año era inaceptable bien lo sabía. Todo había terminado, salío se volvío a poner sus lentes oscuros y se dirigio a la salida, guardo bien su carné en el bolsillo y se le vio alejándose, los lentes ocultaban su triste rostro, lo había hecho, pero aún quedaban días de incertidumbre y sólo quería acostarse y dormir. Se le vió alejarse, estaba libre de sospechas.